domingo, 29 de marzo de 2015

Tarea


El último domingo Valentina estaba haciendo los deberes escolares. Eran casi las siete de la noche. Al final, la última tarea del libro era la siguiente: lee la biografía de un científico y pega su foto.

Le alcancé un pequeño libro de biografías que yo leía repetidamente cuando niño, que me gusta mucho, y le dije que Albert Einstein fue un gran científico. Se interesó en él y se puso a leer.

Mientras tanto, yo buscaba en láminas una foto de Einstein que pudiéramos pegar en el libro de tareas. En esas estaba cuando Valentina terminó de leer y escribir su resumen.

- Papá, pero no tengo una foto para pegar, y acá dice "pega una foto".
- Lo siento, hija. Creo que deberás dibujarlo.
- Pero dice "pegar", no "dibujar".
- Es domingo en la noche, hija, ¿dónde voy a conseguir una foto de Einstein?
- Es verdad. Lo dibujaré.

Y buscamos en la internet una imagen de modelo:




Cinco minutos después la tarea estaba lista:




Al día siguiente le pregunté qué le dijo la profesora.

- ¡Muy bien, Valentina!



jueves, 12 de febrero de 2015

Santa y Plaza Vea

Algunas veces Julito me sorprende con sus ocurrencias. Esta es la última, ocurrida la semana pasada:

- Papá -me pregunta-, ¿Santa trae los juguetes en Navidad?
- Sí, hijito, él los trae -le contesto, algo extrañado de que pregunte eso en febrero-.
- Pero hay algo que no entiendo...
- A ver...
- Cuando me fui a dormir no había regalos y cuando desperté ahí estaban. Quiere decir que Santa vino de noche y los puso ahí.
- Correcto.
- ¡Pero el papel de regalo decía "Plaza Vea"! ¿Santa los compró en Plaza Vea?
¡Plop!

jueves, 21 de agosto de 2014

La primera llamada telefónica


Hace dos minutos, mientras estaba jugando con mis adorados hijos, sonó el teléfono (es decir, el de la casa, no un móvil) y yo acudí a contestar:

- ¿Aló?
- Buenas noches -me saluda una voz femenina-, quisiera saber si está Valentina -sorpresa mayúscula para mí, que llamen preguntando por mi hija-.
- ¿Y quién es usted, por favor?
- Soy la mamá de Claudia, una compañera de clases.
- Ah, qué gusto -le miento-, ¿le puedo ayudar en algo?
- Quisiera hablar con Valentina.

Dudando llamé a Valentina, pero me quedé cerca de ella, por si acaso. Vale saludó a la señora, se notó en seguida que la conoce. Pidió que la esperaran un ratito, corrió por su cuaderno, lo abrió en la tarea y le dijo una palabra. Luego se despidió, colgó y se fue.

Y yo como un ganso esperando que me cuente la novedad. Como no me contaba, fui y le pregunté.

- Es que Claudia no escribió bien una palabra, y su mamá me preguntó qué palabra era.
- ¿Y qué palabra era?
- "Perplejo"

Así quedé. Entonces tuve ese sentimiento que me ha asaltado varias veces, la sensación de que mi hija en este momento preciso ha crecido un poco más, de que imperceptiblemente se me ha alejado un poco más, como ha estado haciendo desde que nació. Uno nota que los hijos crecen cuando de repente hacen con naturalidad algo que no hacían antes. Como recibir una llamada telefónica.

lunes, 7 de julio de 2014

Valentina ladina, y Julito inocente


Si será ladina Valentina. Y para demostrarlo, vaya este diálogo entre Julito y Evelyn, que escuché por casualidad:

- ¿Qué estas comiendo hijito?
- Una mandarina jugosa.
- ¿Jugosa?
- Sí, y Vale está comiendo una mandarina sin jugo.
- ¿Y cómo sabes que la mandarina de Vale no tiene jugo?
- Ella me dijo. Me dio la mandarina chiquita pero jugosa y ella se quedó con la grande sin jugo.

Sólo nos quedó reírnos del cuento de Valentina para quedarse con la mandarina más grande. Y de lo crédulo que es su hermano.

domingo, 6 de julio de 2014

Esto es vida


Eso mismo dijo Julito cuando encontró la hamaca, en un día de piscina:


jueves, 20 de febrero de 2014

¿Ya van solos?


Hoy, cuando llamé a Eve y le pedí hablar con Julito y Vale, me dijo: "no puedes hablar con ellos..., porque han salido." 

Eran las ocho de la noche.

- ¿Han salido?
- Sí, fueron con mi mamá a la casa de Ethel.

Y se me ocurrió comentar que hace poquito nomás ni bajaban de la cama sin que les viéramos, y ahora ya salen solos. Bueno, solos es un decir, que están con su Tita y sus tíos, pero sin nosotros.

Me ha dado no sé qué. Imagino que es así como debe ser.

domingo, 16 de diciembre de 2012

Gallinas


Hoy me ha causado gracia una conversación telefónica con Julito:

- Hijito, tus gallinas ya están grandes.
- ¿Como un árbol?
- No, las gallinas no se ponen como un árbol, ya están adultas.
- ¿Como dinosaurios?
- No, no tan grandes.
- ¿De tu tamaño?
- Quiero decir que ya están adultas, ya no son pollitos.
- ¿Ya son gallos?
- Sí hijito, ya son gallos.